María Victoria (viuda de Ramón de Valenzuela) nos comenta que a Ramón lo detuvieron en Francia los alemanes y lo mandaron devuelta a España, más específicamente a la cárcel de Ávila, donde la obligación de salir al patio representaba para él una tortura (decía que Ávila tenía tan sólo dos estaciones la del invierno y la del ferrocarril). Mariví (apodo de María Victoria) también recuerda en la entrevista otras aspectos de los años de cárcel de su marido como por ejemplo que a los presos de ese penal los obligaban a cantar el cara al sol y que todos los días fallecía uno. Pasados cinco años Ramón es puesto en libertad vigilada y se casan en España, tiempo después vienen a la Argentina, donde Ramón nunca pudo ejercer su carrera de Licenciado en Filosofía y Letras, a pesar de este impedimento tanto él como María Victoria se transformaron en autores de varios libros. Para más información acerca del exilio de Ramón y Mariví VÉASE: MEJIA RUIZ, C. (dir.) Dos vidas y un exilio. Ramón de Valenzuela y María Victoria Villaverde. Estudio y Antología. Madrid: Editorial Complutense, 2011.